Cuando veo el respeto y la veneración que profesan músicos y cantantes por el cancionero estadounidense, esos grandes temas escritos para Broadway o para Hollywood por autores como George Gershwin, Irving Berlin, Jerome Kern o Cole Porter, siempre pienso que en España no hemos querido, ni sabido, valorar lo nuestro. El mundo del jazz se ha volcado con estos autores estadounidenses, actualizándolos y dignificándolos con adaptaciones y versiones que han ayudado a mantener vivo el género. Con nuestro patrimonio musical no ha pasado lo mismo; el flamenco, por ejemplo, apenas ha sido sometido a revisión, son pocos quienes se han animado a fusionarlo con otros estilos, aunque cuando esta situación se ha producido los resultados hayan sido fabulosos y esperanzadores, es el caso de las iniciativas jazzísticas llevadas a cabo por genios como Pedro Iturralde o Paco de Lucía.
He de decir que estoy encantado con el tema con el que se despide Eduardo, después de esta fabulosa semana con sus canciones y sus recuerdos. Y qué mejor que despedirse con «Ev’rytime We Say Goodbye», uno de los clásicos de Cole Porter, escrito en los años cuarenta. Hay muchas interpretaciones -no descarto ocuparme de él en algún miércoles de versiones-, pero nuestro invitado ha querido que sea Ella Fitzgerald quien nos deleite con su excepcional manera de cantar. Ha sido un placer contar con tu presencia y tu buen gusto musical, muchas gracias por haber compartido con nosotros estas cinco canciones, esas cinco porciones de tu vida. Un fuerte abrazo.
«Hemos llegado al final de mis cinco propuestas y ninguna canción más apropiada para terminar la semana que este clásico sobre las despedidas. Como en otra de las canciones de mi selección, este tema lo tengo muy asociado con otro programa de radio, La calle 42, que estaba dedicado a la comedia musical de Broadway y, en menor medida, del West End de Londres. Estuvo muchos años en antena y, cuando terminó, lo hizo con esta canción. De entre todas las frases que se han escrito en la historia de la música (y que yo conozca, claro), una de las mejores pertenece a esta canción –no es de extrañar, Cole Porter era un gran letrista–, y es: “¿Por qué los dioses de allá arriba, que lo deben saber todo, piensan tan poco en mí, y te dejan marchar?” Aunque multitud de cantantes la han hecho suya, una de las versiones más conocidas es la de Ella Fitzgerald, con esa voz leal y cristalina».
Lo que está claro es que los USA en este tipo de historias, van por muy delante. El respeto a su pequeño legado cultural, en comparación con el del viejo continente, es inmenso. La promoción de su cultura, de su música, de sus raíces es más que evidente. Y no sólo a nivel de entretenimiento y ocio si no que a nivel educativo es infinitamente más profundo y ahí es donde dan el do de pecho. Universidades en las que hay doctorados sólo para estudiar estos fenómenos musicales explican el por qué. Eso en España es algo impensable.
Y es una lástima por que como bien comentas, tenemos un legado musical bastante más rico y amplio en muchos sentidos. No sólo por el Flamenco en sí, si no por todo el desarrollo musical sinfónico, la música medieval, la importante influencia sefardí, judía y árabe en nuestro trasfondo musical y un largo etcétera.
En España no interesa la difusión, promoción y el legado de la cultura, en general, ya lo hemos comentado en más de una ocasión. Ni vende, ni da dividendos, ni beneficios. Es lo único que importa. Por eso la labor de difusión «personal» o «privada» a través de blogs como éste y muchas otras fuentes, es tan y tan importante.
Bravo una vez más por el post!
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Efectivamente, Santy, lo del flamenco era un ejemplo, pero lo has explicado muy bien, tenemos un patrimonio cultural de muchos siglos y muy variado que, en la mayoría de las ocasiones, ignoramos y hasta maltratamos. Y luego estamos cuatro quijotes tratando de reivindicar lo que, en realidad, no interesa a casi nadie. Es posible que la sociedad norteamericana sea, en líneas generales, tan zafia como la nuestra, pero al menos quienes gobiernan o administran tratan de defender su patrimonio cultural, lo promocionan y gastan dinero en él. Muchas gracias por tus palabras, Santy, y por tu interesante comentario. Saludos.
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Tienes razón, aquí no se promociona lo suficiente nuestro legado cultural. Es apabullante la cantidad de bibliografía que hay en Estados Unidos sobre jazz y otras manifestaciones musicales y en España es bastante escasa en comparación.
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Pues ha sido todo un placer leerte y escuchar tus propuestas Eduardo, aunque alejadas de lo que suelo ponerme habitualmente (excepto Queen) son hermosas canciones con un sabor muy particular y que merece la pena disfrutar.
Gracias y hasta otra!!
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Siempre está bien de vez en cuando ampliar el campo de visión de la música porque sueles llevarte gratas sorpresas. Gracias a ti por leerlas y escucharlas, Alex.
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Una de las canciones preferidas de mi mujer, pero en la versión de Simply Red, uno de sus grupos favoritos.
Totalmente de acuerdo con las palabras de Santy, y enhorabuena a Eduardo porque sin duda sus aportes han sido los más originales de todos los que hemos participado en esta sección. Lo dije hace mucho en Mental, lo bueno de tener un blog es que conoces gente con gustos muy diferentes a los tuyos, pero que por una causa u otra, básicamente la pasión, hacen que inmediatamente conectemos con ellos.
Saludos y soleado finde a todos.
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Pues sí, Salva, estoy muy de acuerdo contigo, a mí también me ha gustado mucho esta semana con Eduardo. Ya lo hemos comentado en alguna ocasión, es francamente enriquecedor encontrarte con personas que aman la música y que, de paso, pueden enseñarte por qué escuchan lo que escuchan, el valor de esos estilos que, tal vez, no hayamos asimilado lo suficiente. Aquí dejo, especialmente dedicada a tu mujer, la versión de los Simply Red. Un abrazo.
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Muchas gracias por la dedicatoria
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Afortunadamente, la música no son solo departamentos estancos y hay propuestas para todos los gustos. Por cierto, dile a tu mujer que tiene muy buen gusto.
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Un gusto excelente Eduardo, no obstante fue ella la que primero me fichó jajajajaja.
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Bueno yo diría que ese cancionero americano tan respetado y usado por los americanos ha tenido la gran palanca del cine musical.
Por el contrario el flamenco y el jazz llevan fusionándose desde 1967 en España, cuando Pedro Iturralde graba en Berlín su gran Flamenco Jazz.
Gran tema de Ella sacado de un disco sensacional.
UnA gran selección la de Eduardo.
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Sí, el cine musical ha sido un gran apoyo para ellos. En cuanto al flamenco, yo también mencionaba a Pedro Iturralde, ese disco es sensacional pero me la impresión que luego no han sido tantos los intentos continuistas en este sentido. Buen gusto musical el de Eduardo. Saludos, Irotula.
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