Cuando acudes a un concierto de Roger Hodgson lo que menos te esperas es que, al entrar al recinto, suene una copla cantada en directo; la verdad es que la cantante lo hacía muy bien, su versión de «Y sin embargo que quiero», entre flamenca e indie, me pareció bastante buena y me hizo pensar, tras echar un primer vistazo al espacio habilitado para este festival, en cuánto había cambiado este evento desde la última vez que participé en él, hace dos años, en el concierto de Imelda May. Me alegré mucho al ver que «Las Noches del Botánico» empiezan a consolidarse como acontecimiento de referencia, para todos los que amamos la música, en las sofocantes noches del verano madrileño. En las fotos que os dejo a continuación podéis comprobar el ambientazo que habían preparado: tiendas, bares, restaurantes de comida rápida tipo food truck y, por supuesto, una actuación en directo para entretener la espera y complacer a unos parroquianos más próximos a los sesenta que a los cuarenta años (los hijos que acompañan a los padres siempre bajan la media de edad en estos conciertos).
Esta vez sólo fuimos tres los que nos animamos a pagar los 49,5 euros que costaron las entradas, tres de los habituales en estos saraos: Begoña, mi hermano Carlos y quien escribe. Entramos hacia las 21:10 de la tarde, nos entretuvimos dando una vuelta y nos tomamos una cerveza; teníamos entrada sin numerar, de pista, aún así no corrimos mucho para buscar un acomodo razonable; a las 21:40 -más o menos- ya nos habíamos situado, justo a tiempo porque cinco minutos después ya no cabía ni un alfiler, hubo un llenazo total, como se puede apreciar en estas imágenes facilitadas por la organización. El concierto empezó a las 22:15 horas y finalizó hacia las 24:00 horas, sin descansos ni interrupciones de ningún tipo; comenzamos con el tema «Take the Long Way Home» y finalizamos con «It’s Raining Again», en medio pudimos escuchar un puñado de canciones de lo mejorcito del repertorio de Supertramp («School» -no os perdáis el vídeo grabado por mi hermano Carlos, que haría sin él en los conciertos …-, «Breakfast in America», «The Logical Song», «Child of Vision», «Dreamer» -de ésta también hay vídeo-, «Fool’s Overture», «Give a Little Bit», algunas melodías pertenecientes a sus discos en solitario («Death and a Zoo» o la bellísima «Lovers in the Wind») y un par de temas inéditos («Teach me to love again» y «The Awakening»).
No os podéis ni imaginar el aspecto jovial y saludable que tiene Roger, ni mucho menos aparenta la edad que tiene (67 años). Una taza lo acompañó toda la noche, tal vez sea ese el secreto de su eterna juventud; mi hermano dijo que la taza sólo podía contener dos cosas: té o ginebra, y me lo dijo muy convencido … Aunque parezca increíble, su voz está igual que hace treinta o cuarenta años, luciendo esos agudos y falsetes tan característicos suyos que lleva al límite, hasta ese punto de no retorno del que sólo Roger sabe salir airoso. La banda que lo acompañaba está formada por excelentes músicos; tal y como señala eldiario.es, es la habitual de Hodgson: David J. Carmenter (bajo), Bryan Head (batería), Kevin Adamson (teclados) y un canadiense llamado Aaron McDonald, imagino que de ascendencia hispana, que encandiló al público con su manera de tocar los instrumentos de viento (saxo, flauta, melódica, armónica y probablemente algún instrumento más de los que desconozco el nombre) y su disposición para todo lo que hiciera falta: teclados, voces, pandereta, etc.
Ya sé que habrá quien me diga que Supertramp aún existe, y que está capitaneado por tres de sus miembros históricos: Rick Davies, Bob Siebenberg y John Helliwell. Tras la finalización del concierto, Begoña me envió una antigua entrevista a Roger Hodgson en la que éste no oculta su malestar por los actuales Supertramp, de quienes dice son «sólo el nombre de una marca»: «Rick Davies explota como si se tratara de una empresa que cada cierto tiempo sigue explotando para sacar algo de dinero. No hay banda, son unos músicos que se reúnen para irse de gira. Ya está. La verdad es que para mí estaría todo perfecto si se limitaran a tocar sus canciones, pero me disgusta la decepción que están provocando en mucha gente cuando que va a ver un concierto de ellos y no reconocen la voz del cantante. El gran público no sabe la historia de que yo dejé el grupo y piensan que van a escucharme cantando, pero se encuentran otra cosa. Esto ocurre en todas sus giras: cada cierto tiempo, recibo una avalancha de correos electrónicos de gente enfadada y decepcionada. Y me molesta que ocurra eso con algo que fue mi creación».
Para ser justos, he de decir que no he visto en directo a los «Supertramp oficiales», pero también os puedo asegurar que el martes pasado yo escuché a Supertramp, a ese grupo que me acompaña desde mi adolescencia, con el que tanto he disfrutado y al que jamás pudé ver porque nunca tuve dinero para pagarme la entrada. No hace falta ser muy avispado para darse cuenta del cariño con el que Roger Houdgson hace las cosas, de las horas de trabajo que debe dedicar a la música y de lo bien que prepara los directos (el sonido fue impecable, de una calidad fuera de lo común en conciertos de rock), todo encaminado a desmostrar que Supertramp es él. Visto lo visto la otra noche, a mí no me cabe ninguna duda del «quién es quién» en esta disputa.
Roger estuvo simpático a rabiar, no paró de hablar, de reír, de piropear a nuestro país -donde dice encontrarse muy a gusto- , y al público español porque, en su opinión, «no hay público igual». Nos invitó a dejar a un lado todos nuestros problemas durante un par de horas, y vaya si lo consiguió. Muchas gracias, Roger, por recordarnos que la buena música aún existe.
La Guitarra de las Musas 
Menuda crónica tan pormenirizada que te has marcado. A lo mejor has equivocado tu profesión, tienes alma de periodista jaja.
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Jajaja, a estas alturas ya es poco difícil que cambie de profesión. Muchas gracias, Eduardo, todo es más fácil de escribir cuando la experiencia ha sido intensa. Saludos.
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Se nota que lo pasaste muy bien, solo con leer los títulos de las canciones ya me ha dado un poco de envidia.
Me hace gracia el 49,5 de la entrada, parecen las rebajas.
Muy buena la crónica que has escrito.
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En realidad fue un concierto de Supertramp con algunas canciones de Roger de sus discos en solitario, y además de las mejores y más conocidas por todos, un 10 también para la setlist. En realidad la entrada valía 45 euros, los 4,5 restantes debe ser por sacarlas online y por alguna cosa más que aún desconozco ¡Muchas gracias, Evavill! Un abrazo.
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¡¡¡Estupenda crónica y magníficas fotos y videos!!! Debió ser un pedazo de concierto y si sonó tan bien, miel sobre hojuelas, porque las más de las veces el sonido deja mucho que desear en los directos. Muchas gracias por compartirlo con nosotros Raúl.
Yo ya he avisado en Rock Telegram de que me voy al concierto de Scorpions, tengo un montón de ganas de ver a los alemanes: ¡¡¡será mi primera vez!!!
Abrazos y buen finde!!!
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¡Muchas gracias, Alex!, es un placer compartir con todos la experiencia, así se vive más, incluso después de haber acabado. El sonido nos dejó alucinados a los tres; a menudo no se escuchan bien los micrófonos, otras veces las guitarras están demasiado altas y distorsionan, en fin que no es habitual encontrarse con un sonido tan limpio y, en definitiva, tan parecido al de los discos. Bueno, ya nos contarás qué tal los Scorpions, a ver si siguen en forma. Un abrazo.
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¡Qué buen puñado de temas de Supertramp! Se nota que lo pasasteis muy bien, me alegro mucho Raúl.
Abrazo
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Lo pasamos muy bien Jake, siempre hay alguna cabeza que no te deja ver del todo bien, por lo demás un concierto de esos para recordar. Un abrazo.
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Hijo mío, hay que ver la caña que te has dado para escribir esa entrada prometida. La cual es maravillosa y no puedo menos que felicitarte, muy completa, de verdad. Pues tengo muchas cosas que decir al respecto. Para los que lean todo esto y no lo sepan, yo también vi a Hodgson, en este caso en Barcelona la noche del 12, acompañado de mi hermano. Efectivamente, el sonido fue absolutamente impecable. También diré, antes de seguir, que será la próxima entrada que escriba cuando termine otra. Incluso aunque no encuentre vídeos subidos por ese público de esa noche, Hodgson merece correr el riesgo o hacer esa trampa.
Pese a impecable el sonido me pareció por momentos que pecaba algo de contundente, demasiada caña, y no es exactamente una crítica. Desde luego la potencia era obvia, y Hodgson parece haber apostado por un sonido vitaminado, por enfilar una cierta caña y un envite popero que anima los temas. Algo de cierta calma y detalle de los temas de estudio eché en falta, pero pese a todo lo dicho, sonido de verdad im-pe-ca-ble, que quede claro.
Pues 49’50 euros…qué suerte la vuestra, porque en los Jardines de Pedralbes el precio mínimo eran 80 euros. Todas las localidades sentadas, eso sin duda sube el precio. Mi primera intentona de comprar rondaba los 92 euros por barba, al final me costó 104 x 2. Pero no me sabe nada de mal.
Repaso a los temas gloriosos de Supertramp, de los 18 temas -2 horas- 14 fueron del grupo y 4 de su carrera. Es cierto, él compuso las mejores canciones y es el alma de Supertramp. Mi hermano no sabía que seguían existiendo. Lo busqué en la wikipedia después y se lo mostré mientras bebíamos nuestra tercera cerveza: Son 10 miembros, lo cual suena a mercenarios absolutamente, y llevan sin sacar material nuevo creo que desde el 2002. O sea, a exprimir la gallina de los huevos de oro con recopilatorios y best of.
También Hodgson saca recopilatorios, pero por lo menos su pasión sigue intacta y casi su voz. Fue una noche mágica y preciosa.
Podría añadir más, pero lo reservaré para mi entrada. Creo que los Jardines de Pedralbes superan en belleza a lo que veo del Botánico, pero te lo has currado con tantísimas fotos. Estuve absolutamente perezoso y no hice ni una, ni vídeos (había en la fila de delante gente grabando, y muchos más, confío en estos uploaders…). Y ahora me sabe mal, visto tu magnífico reportaje.
Solo diré que me sentí en la gloria absoluta escuchando los primeros acordes de la maravillosa Take the Long Way Home, y que por otro lado la interpretación y ejecución de Fool’s Overture fue absolutamente magistral, el punto álgido de la noche. ¿O lo sería Give a Little Bit, con el público en pie, batiendo palmas para acompañar esta gema del pop-rock?
Los Jardines de Pedralbes. el grande de Sting, que tocó allí el 6 de julio, nos dará una idea de este maravillso recinto al aire libre…
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¡Muchísimas gracias, What! Ayer estuve toda la tarde preparando la entrada; cuando puedo y tengo tiempo prefiero hacerlo así, para que no se me olvide nada, sobre todo lo que tiene que ver con las sensaciones, las anécdotas y lo que puedes ver y oler, todo el ambientillo que rodea al concierto. El primer mosaico de fotos lo hice yo mismo cuando entramos, el resto son de mi hermano, al igual que los vídeos, siempre lo tengo de aliado para estos menesteres, se da mucha maña y abuso un poco de él. Tengo otro vídeo de «The Logical Song», pero las cabezas de delante obligaron a parar la grabación a mitad de canción. Bueno, ya estoy esperando tu crónica, estoy seguro que ya habrá vídeos y fotografías en la red; en entrada, veo que vuestro concierto fue algo más largo y hubo más canciones que en el nuestro y, desde luego, no hay punto de comparación entre Los Jardines de Pedralbes el Jardín Botánico de la UCM, no es que esté mal el sitio, de hecho a mí me gusta y ya le tengo cariño, pero lo de los Jardines de Pedralbes es de Matrícula de Honor, la verdad es que me debería de organizar para ir un año a uno de los conciertos que se celebran allí. En cuanto a lo de la contudencia del sonido, es cierto que tenía que suplir determinadas carencias difíciles de conseguir en directo (hay temas como School o «Fool’s Overture bastante complejos) con un poco de músculo, a ello ayudó bastante Aaron McDonal, el saxofonista (y multiinstrumentista), que al menos el martes estuvo soberbio. Pues sí que os salió más caro a vosotros …, en cualquier caso en Madrid también había precios superiores, en la grada numerada, pero estaba situada detrás de nosotros, así no nos pareció buena idea. Ya esperando tu crónica … Saludos.
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Ufff que conciertazo, es lo primero que se me viene a la cabeza, con la mejor compañía que podía tener, mi hermano y Begoña que para mi es como de mi familia y una noche que se prometía calurosa, pero que torno en muy agradable y no solo por el tiempo, si no que poder ver y escuchar a Roger echo un chaval fue todo una gozada y que decir de su banda » impecables». La verdad creo que es de los con ciertos de mas calidad que he visto, todo fue rodado y con exquisita perfección, las voces claras, cada instrumento en su tempo y sobre todo bien definidos en cada momento, parecía, como le dije a mi hermano durante el concierto, que era un disco de estudio, por la perfección de sonido, parecía que ya tenían aplicados todos los filtros, madre mía que potencia de músicos y un hurra por el de la mesa de mezclas, todo un crak.
Saludos para todos los amigos del blog y un beso para ti hermano y otro para Begoña.
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¿Qué tal los vídeos, Carlos? Han quedado bastante bien, ¡muchas gracias! Yo también lo recordaré como uno de los conciertos de rock con mejor sonido. Aún seguimos sin saber que bebía Roger … Besos.
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Bueno con un Samsung Galaxy 8 o un iPhone 7 seguro que quedaría mejor, pero 800 € tienen la culpa, para un móvil chino como el nuestro no se le puede pedir mas, creo que se porta muy bien para lo que cuesta y por cierto yo me decanto por la ginebra, por que con lo bien que esta seguro que se mantiene en alcohol, jejejeje.
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jajaja, lo mismo bebe ginebra con té (es un potente antioxidante), todo es posible …
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Genial,como me hubiese gustado acompañaros, y escuchar esa canción school que me sigue poniendo los pelos como escarpias,aún escuchándolo en un móvil…sensacional
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En cuanto salió (fue la segunda en sonar), le dije a mi hermano que la grabara. Es mi preferida de Supertramp, junto con «Fool’s Overture». La próxima vez te apuntas, Vidal, Zaragoza no está tan lejos de Madrid … Saludos.
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Este comentario es para Raúl y también lrotula. Vuelvo a la carga con Carmen (El Collar de Hampstead), porque ha escrito una excelente crónica sobre el concierto de Madeleine Peyroux y Andrea Motis. Por cierto que ya le he puesto al corriente de que la he estado mencionando por aquí.
Enlace a su crónica por si os interesa leerla:
https://elcollardehampstead.blogspot.com.es/2017/07/madeleine-peyrouxmagica-la-luna-de.html
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Ahora mismo me paso, gracias por avisar What.
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Take the Long Way Home…
https://youtu.be/QZyTCTJNIJk
So you think you’re a Romeo, playing part in a picture show…Qué canción, es que me derrite…
https://youtu.be/TZBR5BqFj2Q
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¡Gracias!
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Fenomenal crónica, Raúl .Me encanta que disfrutases tanto el bolo, de verdad. Y ahora la pregunta del millón, ¿estos tipos tienen relevo generacional?… creo que no. Un abrazo, maestro.
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¡Muchas gracias, Fran! Si le preguntamos a la gente joven tal vez dirían que sí (eso sí, me lo tendrían que demostrar hablándome de músicos y grupos de verdadero nivel), a nosotros nos parece imposible, al menos en el rock, tal vez en otros estilos sí pueden emerger buenos talentos. Un abrazo.
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