Casi todo el mundo habla de la “Movida Madrileña” hasta llegar a la mitificación. En realidad duró poco tiempo (apenas 4 ó 5 años), aunque fue muy importante para todos los que vivimos aquella época y sirvió como expresión de la ruptura definitiva con el franquismo. Sus valores musicales son discutibles, eso sí fue el trampolín en el que se impulsó el pop español de los 80 y los 90, un movimiento de los más importantes que ha experimentado nuestra historia musical. Otra de las injusticias ha sido circunscribir “La Movida” a Madrid, cuando hubo otras zonas de España donde el fenómeno tuvo también su importancia. Con la canción de hoy, “Hazañas Bélicas”, del grupo asturiano Stukas, quiero rendir homenaje a “la otra Movida” y, de paso, recordar a esta veterana banda, apenas conocida fuera de su territorio natural. Según cuentan en su página web, los orígenes se remontan al año 1961, cuando un grupo de amigos de La Felguera decidieron formar un grupo musical; al principio tocaban en festivales, fiestas de amigos y lugares como el Teatro Pilar Duro o el Cine Sindical. En 1964 decidieron llamar a la banda Stukas, en recuerdo de los Junkers Ju 87 de las fuerzas aéreas alemanas, característicos de la II Guerra Mundial, que los integrantes de este grupo veían en los tebeos españoles de Hazañas Bélicas que tanto éxito tuvieron en la España franquista. La formación original la integraban José Miguel García (voz), César Valdés (bajo), Manolito Antuña (guitarra solista), Enrique Álvarez (guitarra rítmica) y José Luis Menéndez (batería); con ella actuaron por todo Asturias, consiguiendo premios como el de “Conjuntos Modernos” o “Rumbo a la Gloria, incluso compartieron escenario con Los Brincos, Los Bravos, Les Surf o Jaime Morey, casi siempre interpretando versiones de otros y haciendo música de baile. La oportunidad de grabar sus propios temas apareció en 1981, vino de la mano de la Sociedad Fonográfica Asturiana, la entidad que les editó su primer álbum: “Hazañas Bélicas” (1981). Este trabajo les abrió las puertas de la televisión (actuaron en “Tocata”) y de la “movida madrileña”, con actuaciones en Rock-Ola o en la Casa de Campo. Durante los ochenta y los noventa continuaron publicando álbumes, incluso en los primeros años del presente siglo. Su tema quizás más conocido, al menos para los que no somos asturianos, es el titulado igual que su primer álbum, una canción pop muy de la época, con una letra arrebatadoramente adolescente que nos habla de lo difícil que era luchar con aquellos ídolos que forraban las carpetas de las chicas, en una época en la que el amor se vivía como si fuera una hazaña bélica. A pesar de lo sencilla que es la canción, hay un interesante trabajo de guitarras en ella y algunos arreglos de viento inusuales para la época. Podéis escuchar esta melodía en la película española “La Torre de Suso”, y hay una versión de ella a cargo del grupo femenino de Gijón Urdershakers, ya desaparecido; esta versión forma parte del álbum “Homenaje a Stukas” (1997), en el que también intervinieron artistas como Víctor Manuel o Burning.
La Guitarra de las Musas 
Muy bonita la canción, sobre todo esos arreglos de guitarra, como señalas. Pues no la conocía, tampoco al grupo…
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No es un grupo muy conocido fuera de Asturias, creo que aún siguen en activo. En aquella época las canciones eran sencillas, pero me da la sensación que ésta está bastante cuidada. Saludos.
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Dos cosas: si hubiera tenido que responder sin previo aviso, hubiera dicho que un stuka era un caza alemán de la II Guerra Mundial. De eso me sonaba, ahora veo que era «un bombardero en picado». Y la segunda, hace unas semanas una bloguera me dijo que el grupo Las Odio le recordaban por estilo y actitud al grupo de las Undershakers, que debo decir que jamás había oído.
Pues estoy muy de acuerdo con las reflexiones que haces sobre la Movida. La calidad musical no es que fuera su rasgo más característico, sino la actitud vital, la transgresión y la provocación. Y la música fue un elemento más entre otros muchos. No olvidemos que también supuso la eclosión de la juventud y la eclosión de la libertad en unos años clave que serían la transición hacia la democracia. Probablemente la Movida se haya magnificado e idealizado con los años. Desde luego uno de los más descarados fue Almodóvar, también por su ruptura en cuestiones sexuales. Su cine era una clara muestra, recuerdo haber visto sus películas casi con devoción unos años más tarde, me traen muy buenos recuerdos y no pocas risas, cómo no. Alaska también, siempre estuvo muy presente y en primera línea, aunque desde los sectores más rockeros se criticaran sus discos. Yo recuerdo algunas joyas como Flores Envenenadas, o algunos temas de Deseo Carnal. Todo esto como simple aficionado a la música y la cultura, no he leído más allá de artículos en revistas musicales.
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Y en cualquier caso, fue un magnífico caldo de cultivo para la música española, pues el pop y el rock después vivieron dos décadas, casi tres, fantásticas, con todo ese batallón de grupos tan diversos, y algunos tan buenos.
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Es verdad que tuvieron todo el apoyo de las discográficas, pero eso no le quita méritos a aquel movimiento musical.
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No conocía a las Undershakers, hasta que preparé esta entrada y, la verdad, es que la versión me ha gustado, a ritmo doo-wop pero con voces de chicas. Recuerdo las sensaciones de aquellos años: todo era posible, no había nada prohibido ni nada políticamente incorrecto en lo relativo a los comportamientos, ni frenos a la creación, incluso te podías encontrar al alcalde Tierno Galván y darle de beber de una bota en la fiestas de San Antonio de la Florida (aunque pueda parecer una barbaridad, eso me pasó a mí y el alcalde bebió …) Por eso tengo tan buenos recuerdos de aquella época, en la que incluso aparqué durante una temporada a mi querido rock para meterme de lleno en la vorágine pop. En fin, recuerdos del abuelo cebolleta …
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No te / me / nos llames «abuelo cebolleta», jajaja, ya sabes que me fastidia sentirme viejo, pensarlo siquiera. «Señores maduros, interesantes y cultos con muchas cosas fascinantes que contar».
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Jajaja, lo tendré en cuenta …
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¡Yo conocía esta canción! Que hasta me sé cachos y todo, pero no tengo ni idea de cuándo la he escuchado tanto como para eso… Y no es de La Torre de Suso, que vi en su día.
¿Por qué eso de que los valores musicales de la Movida son discutibles?
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Es un tema bastante controvertido y que conviene puntualizar, al menos como yo lo entiendo. La «Movida» duró poco, yo diría que desde 1979 hasta 1983 ó 1984; durante esa época aparecieron grupos de chicos muy jóvenes que, en la mayoría de ocasiones, no tenían ni idea de tocar un instrumento o cantar, eran divertidos, transgresores, hicieron canciones que siguen siendo muy recordadas, pero sonaban como buenamente podían. De esta época son Kaka de Luxe, Johnny Comomolo y los Gansters del Ritmo, Alaska y los Pegamoides, Vulpes, Parálisis Permanente, Los Nikis, etc. En general no tuvieron mucho recorrido, excepto algunos grupos que fueron puliendo su estilo, como Radio Futura, Loquillo, Gabinete Caligari, etc. Todas estas bandas supervivientes de la «Movida», junto a otras que vendrían después (La Guardia, Danza Invisible, El Último de la Fila, Tam Tam Go, Los Ronaldos, La Frontera, etc.) acabaron eclosionando en un movimiento en torno al pop de mucho alcance y recorrido (desde los sesenta, con el movimiento ye-ye, no ocurría algo así en España). Estas bandas que dominaron la escena española durante los ochenta y los noventa ya eran de calidad. Quienes lo pasaron peor fueron los rockeros, prácticamente desplazados por todas estas bandas. En los ochenta y los noventa sólo el heavy metal y el rock urbano consiguieron resistir las embestidas del pop o, más bien, de las discográficas que lo apoyaban. Espero no haberme enrollado demasiado.
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Qué va, te agradezco mucho la explicación. Entiendo que muchos lo usaron como un medio de rebeldía más que como demostración de arte o de una pasión. Y supongo que entre esos que «sonaban como buenamente podían» están Almodóvar y su Mcnamara (si no recuerdo mal). Se convirtió, la música, en un medio de rebeldía y reivindicación.
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Todo depende de lo que se considere que engloba la música como arte; para ellos lo estrictamente musical era algo secundario, como bien dices, su intención era provocar, transgredir y divertirse. El resultado es algo que cada uno tiene que valorar, en función de lo que le parezca más importante en la música. Ya que mencionas a Almodóvar y McNamara (efectivamente, sonaban como podían ..), con el cine de Almodóvar de aquella época sucedió algo parecido; probablemente un crítico cinematográfico te dirá que «Pepi, Luci, Bom …» es una chapuza pero, en cambio, un sociólogo o un estudioso del cine social hablen maravillas de esta peli, de lo que supuso para aquella sociedad española. Al final todo depende de la óptica de cada uno …
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Cierto, según a qué aspectos se les de más valor. Muy interesante me parece esta reflexión. La verdad es que la Movida me llama la atención desde hace mucho, aunque yo la he conocido ya pasada.
Gracias 🙂
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Hola, Raúl.
Creía que no los conocía pero luego sí me ha sonado la canción al escucharla.
Estoy bastante de acuerdo con lo que dices sobre la famosa «Movida», no es que fueran grandes grupos, algunos directamente eran malos, pero lo compensaban con otras virtudes.
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¡Qué bien! Pensaba que no la conoceríais. No eran los mejores haciendo música pero tenían letras graciosas, iban vestidos y pintados buscando el espectáculo y ponían de los nervios al ala más conservadora. Saludos.
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Raúl, lo primero avisarte de que el vídeo, al menos en mi navegador, se ha caído. Lo he buscado en Youtube y lo primero que me ha saltado a la vista es la portada: la recordaba perfectamente de haberla visto en los BID’s de la época; eso sí, si hubiera escuchado esta canción entonces, la hubiera descartado de inmediato: no hubiera resistido el Metalómetro ni de coña jajjaja
Como comentabas más arriba, el Rock (Hard, Metal, Prog…) no le debe mucho a la Movida y de ahí que muchos no la hayamos mitificado ni la tengamos en un pedestal: como bien dices, cuestión de óptica.
Un abrazo!!!
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Lo comprendo, me acuerdo perfectamente cómo fue aquello: el progresivo quedó fulminado, el rock urbano herido de muerte y sólo el heavy metal logró, a duras penas, sobrevivir. Las discográficas se volcaron con los grupos de pop, de ahí que esos colectivos no tuvieran mucho apego a lo que representaba la «Movida»; entendían que era un movimiento de pijos con suficiente dinero como para comprarse instrumentos que no sabían tocar y, encima, recibían los aplausos del público y de las productoras. Como he ido señalando en comentarios anteriores, yo lo viví de otra manera … Un abrazo.
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Sí, ya lo hemos comentado otras veces: creo que somos ejemplos perfectos de cómo se vivió la Movida desde puntos de vista y lugares (las diferencias entre un pequeño pueblo extremeño y Madrid entonces eran abismales) diferentes.
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Rectifico: al refrescar la página ha aparecido el vídeo. Debió ser un fallo momentáneo de mi conexión.
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Genial aporte, yo los conocía por el nombre y poco más, la verdad que en esa época era una hazaña bélica todo no sólo conquistar una chica, también sobrevivir en esos años al que la música esta en particular le puso colorido, frente a los tonos grises y más oscuros de otras músicas que eran más conbatibas en sus letras y la manera de tocar…. Pero la NewWabe tuvo tambien su parte conbatiba y si no no hay más que ver las letras y los conciertos de Joy División… TODO SUMA al final y no hay que ser tan sectario y abrirse a todo tipo de música, siempre y cuando sea de calidad… Es verdad que la España Vacía ha hecho y sigue haciendo mucho daño a la musica… Saludos
Por cierto el colorido del popart esta muy presente en esa portada,… La Torre de Suso me gusto, por ese sueño de construir algo, aunque sea una torre entre adultos que dan un repaso a su vida mientras la hacen…. Y las Undersakers, es un pop tan facilon que se acerca más a una música de cabecera de programa infantil
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Muy interesantes todos tus comentarios, Vidal. Estoy de acuerdo contigo, Independientemente de los gustos de cada uno, todo suma en la música mientras se haga con decencia y calidad, y en todos los estilos nos podemos encontrar canciones divertidas, reflexivas, combativas, sencillas y complejas. El otro día me hablaron de la serie infantil Ladybug, vamos a proponer esta versión de las Undersakers como cabecera, jajaja. Saludos.
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