Cuando estaba preparando esta entrada, buceando por internet, me encontré con una entrevista a Manolo García, realizada en junio de 2016, que a punto estuvo de hacerme abandonar la tarea. En ella, decía no querer criticar a quienes están metidos en las redes sociales (me imagino que también incluía a los blogs): “(…) pero lo que sí puedo constatar [es] que nos hace más solitarios, vacía nuestras vidas y nos aleja del sol, de la lluvia, del mar, del aire fresco, de una conversación en un bar, de una cerveza con un amigo, de una tarde de deambular o haraganear paseando por una ciudad”. Me dieron ganas de levantarme y tirarme a la calle, y eso que estaba lloviendo. Decidí, no obstante, acabar de leer la entrevista; lo que venía después acabó de rematarme: “Nadie me ha pedido permiso para meterme en la Wikipedia y no quiero estar en YouTube, estoy hasta los cojones de YouTube. Ahí hay miles de vídeos de El Último de la Fila, pero nadie nos ha pedido permiso. Alguien debería mandar una carta o llamarme por teléfono, pero nadie lo hace y se da por hecho que estar ahí es estupendo ¿Estupendo para quién? Para ellos. Porque para mí lo sería por ejemplo estar en Fuerteventura. Pero nadie nos pregunta”.
Tengo tanta admiración por este autor que, a pesar de lo que acababa de leer, decidí continuar con mi idea inicial de dedicar una entrada a Manolo García, músico que ya había aparecido por aquí gracias a Evavill («Insurrección«) y Luna («Nunca el tiempo es perdido«) y, hace tiempo, a través del tema “Querida Milagros”, también de El Último de la Fila al igual que «Insurrección». Como os podéis imaginar, cerré las páginas de la Wikipedia que tenía abiertas y fui a buscar un libro, en concreto un texto que suelo utilizar a menudo, el de Salvador Domínguez (Los Hijos del Rock. Los grupos hispanos 1975-1989. Madrid: SGAE, 2004); en él, Salvador nos cuenta cómo fueron los primeros proyectos musicales de Manolo García: Los Rápidos y Los Burros, dos formaciones que acabarían desembocando en El Último de la Fila, uno de los grupos más importantes que ha dado el pop-rock español. Manolo García y Quimi Portet, el otro cincuenta por ciento de El Último de la Fila, grabaron con esta denominación siete excelentes álbumes de estudio entre los años 1985 y 1995. Después, decidieron separarse e iniciar sus respectivas carreras en solitario.
El primer álbum de nuestro protagonista de hoy se tituló “Arena en los bolsillos” (1998), un trabajo de gran calidad, con cierto regusto a lo que fue El Último de la Fila pero con unos arreglos musicales y unas letras poéticas que, en algunos momentos, superaban a lo que Manolo había hecho junto a Quimi Portet. Seguro que muchos de vosotros os acordaréis de temas como “Prefiero el trapecio”, “Carbón y ramas secas”, “Sobre el oscuro abismo en que te meces”, “A San Fernando, un ratito a pie y otro caminando” y, como no, “Pájaros de barro”, una de sus canciones más conocidas y valoradas. Os dejo la letra al final de la entrada porque me parece sugerente y bella, y de paso, si queréis, podéis elucubrar en torno al posible significado de la misma. En esta página echan el resto y la diseccionan a fondo; en esta otra, la utilizan como recurso de trabajo. Teniendo en cuenta que Manolo García no es muy partidario de wikipedias, redes sociales y plataformas como youtube o spotify, esta vez he preferido presentar la entrada limpia de enlaces musicales, excepto el vídeo de “Pájaros de barro” que preside la entrada, precisamente el que nos ofrece el canal de youtube de este artista.
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy cierro yo el libro
de las horas muertas.
Hago pájaros de barro.
Hago pájaros de barro y los echo a volar.
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy rechazo la bajeza
del abandono y la pena.
Ni una página en blanco más.
Siento el asombro de un transeúnte solitario.
En los mapas me pierdo.
Por sus hojas navego.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Ya no subo la cuesta
que me lleva a tu casa.
Ya no duerme mi perro junto a tu candela.
En los vértices del tiempo anidan los sentimientos.
Hoy son pájaros de barro que quieren volar.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Cuando no tengo barca, remos ni guitarra.
Cuando ya no canta el ruiseñor de la mañana.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
La Guitarra de las Musas 
Ahí van mis reflexiones…
Anoche, en un blog de wordpress que se llama Budismo Secular, me encontré un artículo en el que se postulaba que las redes sociales en general tienen un carácter fuertemente «samsárico». ¿Qué quiere decir «samsárico»? Viene del vocablo samsara, presente en religiones y filosofías como el hinduismo, el budismo y otras: la eterna cadena de la vida, de nacimientos y muertes (y teóricamente renacimientos, también en consecuencia el karma), la rueda de la vida en ese sentido. Creamos en lo que creamos, se refiere a esa rueda de la rutina de la que es tan difícil escapar. Lo establecido, en cierta forma. Decía esto porque, traduciéndolo a un lenguaje más claro y de nuestros días, esas redes sociales tienen un claro componente de engancharte, absorberte. Te puedes casi hundir ahí, verte arrastrado, son adictivas. Lo mismo aplica a las cadenas de comentarios en los blogs, podríamos decir. Sí, podemos salir, no nos vamos a pasar el día comentando o a poner 30 comentarios en un post, pero lo cierto es que te engancha y te quita tiempo de… la vida fuera de internet. Por eso creo que es muy acertada la idea y pienso leerme ese post. Todo esto conecta obviamente con las reflexiones y opiniones que tiene Manolo, y que juzgo totalmente acertadas. Ya cuando hablé de un tema suyo (Océano Azul) de su último LP, me encontré con una entrevista donde hablaba de eso, que prefería perderse en un paseo, disfrutar de un paisaje o de una charla con un amigo, así que no me extraña que cargue contra el mundo virtual. Que no se trata de demonizarlo, sino de administrarlo en las dosis ¿adecuadas? (no es fácil).
«Manolo García prefiere “recoger piedras por la playa, pasear por el barrio o jugar al dominó” que ver las noticias en la televisión o leer el periódico, pero lo que mejor cura sus heridas es la música».
El tema es muy bueno y muy bonito. Yo creo que la letra alude a lo efímera y corta que es la vida, y a disfrutar de ella…
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy cierro yo el libro
de las horas muertas.
Habla de aprovechar la vida, de vivir intensamente, de ser productivos…
…hoy rechazo la bajeza
del abandono y la pena.
Ni una página en blanco más.
Alude a una relación amorosa que terminó, a esa etapa que ya quedó atrás, y hace énfasis en que sigue su camino, solitario, que en el fondo es lo que todos hemos de hacer, nos guste o no…
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Cuando no tengo barca, remos ni guitarra.
Cuando ya no canta el ruiseñor de la mañana.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Sí, es un canto a lo efímero que es todo. Los pájaros de barro echados a volar y ya de entrada esa arena en los bolsillos. Nada nos llevaremos salvo la experiencia, y la vida se nos escurre entre los dedos como se escurre la arena de la playa.
Namastebeso a todos los pajaritos y pajaritas que posen por unos minutos sus patitas en este post.
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¡Peasssso comentario, qué nivel! Muchísimas gracias porque, además, creo que tienes bastante razón en lo que dices. Precisamente lo que comentaba al principio de la entrada iba en ese sentido, en el fondo Manolo García está muy atinado en su manera de ver el asunto, aunque nos pueda sentar mal a los que estamos en las redes sociales o en los blogs; la sensación que me dio fue la de «tierra trágame», ¿y ahora que hago …? Muy interesante lo que comentas sobre las rutinas y la facilidad que tiene el ser humano para exagerar sus hábitos y comportamientos, qué difícil es mantener el equilibrio emocional e intelectual. Muy bueno el análisis que haces de la letra de esta canción, gracias por compartirlo con nosotros. Namastebeso de vuelta.
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«Peasssso «… jajajaja. Ya, es que existe vida más allá de internet, los ordenadores y demás. Como existe un mundo y existía un mundo antes de que todo eso llegara. Una vez creo que dijiste que un amigo tuyo había dicho «quien no esté en internet, o lo que no esté, es que no existe». Me callé la boquita, pero me parece muy patética esa reflexión, y absolutamente desacertada. No es así. Y en muchos lugares de estos lo que sobra es… VANIDAD.
Por otro lado no tienes por qué decir «tierra trágame» ni nada parecido, tú simplemente haces tu «trabajo», escribes e informas, que los blogs son uno más de los medios de comunicación. Pero se entiende el disgusto de Manolo, o su desaprobación, en temas como las plataformas de vídeo o streaming. ¿Quién se lleva en el fondo los beneficios? King Creosote, aquel cantautor escocés sobre el que puse un tema hace tiempo, reflexionaba igual y los ponía verdes a todos, especialmente a spotify.
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Es que spotify ya es «verde»… jajajaja.
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Bueno, aquello lo decía para provocar, sobre todo cuando queríamos hablar en torno a las fuentes de información, sobre todo en lo relativo a los catálogos de las bibliotecas. Lo de «tierra trágame» también era por la reflexión de Manolo; pensé, ¿qué pinto yo aquí en lugar de estar tomándome unas cervezas en la calle o dando una vuelta (en medio de la lluvia, eso sí)? Lo que sí he notado es lo bien que me viene desconectar de vez en cuando, irme a la playa, hacer turismo, leer con tranquilidad …
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Es verdad que estamos demasiado enganchados a todo lo virtual. Al final, el secreto está en dosificar el tiempo que le dedicamos para que no sea tan absorbente.
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Eso es lo más difícil, Eduardo. Hoy he llegado más tarde a casa (cañas con unos amigos), contestar a vuestros comentarios así es más facil, jajaja. Saludos.
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Estoy celosa, yo elegí «Nunca el tiempo es perdido». 😦
Recuerdo haber leído que Manolo García estaba también en contra de estos programas de descubrir «estrellas» tipo Operación Triunfo, por eso sus canciones nunca se utilizan. En cuanto a lo de redes sociales, etc., creo que como en todo hay que saber buscar un punto medio, saber para qué utilizarlo, porque puede venir bien, pero sin que te absorba.
Y por una vez puedo decir: «Yo tengo este disco y lo he puesto infinidad de veces». Me encanta Manolo García, de siempre -yo lo conocí con El último de la fila, pero tengo también cintas de Los burros. Recuerdo (puede que ya haya contado esto) que algunos se metían conmigo porque me gustaba, me decían que era mariquita. Algo ha avanzado el mundo desde entonces.
Bueno, ya se me ha pasado el enfado así que te mando un abrazo. 🙂
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¡Vaya metedura de pata! Lo siento mucho Luna, he hecho el enlace bien pero he cambiado a las personas, soy un desastre. Es que Evavill eligió «Insurrección», y me he hecho un lío que no veas … Ya está corregido. He visto varias veces a Manolo García y antes a El Último de la Fila, creo casi todas las veces con mi hermana que es una fanática de este músico. También me acuerdo de lo de Operación Triunfo, creo que dijo que no contaran con sus canciones para el programa. Te pido disculpas por el error, Luna. Un abrazo.
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¡No importa! ¡Buen día!
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Pues a pesar de que no me gustan especialmente Manolo García y El Último de la Fila, de que tengo un blog y trabajo con redes sociales y en Internet… Estoy totalmente de acuerdo con él en sus reflexiones acerca del mundo Internet y lo que está restándonos de vida real. Siempre lo cuento, yo trabajé en la sección de Información de Telefónica cuando Internet comenzaba a abrirse paso y estuve en lo que era la punta de lanza de todo ese mundo desde mediados de los 90, cuando Internet era un mundo abierto y hecho por personas y muy pocas empresas y casi todas pequeñas, era otro mundo, un mundo mucho mejor… Ahora todo lo dominan Google y el maldito Facebook y el resto de redes adictivas y perniciosas, desde donde muchas personas están creándose vidas ficticias que no tienen nada que ver con la realidad… Y con el mundo de la música están terminando, no soporto Spotify ni las listas de reproducción ni, por fortuna, las necesito: mis listas de reproducción son los discos… Bueno, no sigo que me enciendo y es muy de mañana y se me agría el carácter jejjeje
Un abrazo!!!
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Desde mi punto de vista, tenemos que entender que las redes sociales, y en general las nuevas tecnologías, tienen que estar a nuestro servicio, y no a la inversa, son herramientas que tenemos a nuestro alcance para utilizarlas en nuestro beneficio. Independientemente de la labor que realizan las grandes empresas, como las que mencionas para tratar de atraparnos en sus redes, la decisión última es nuestra: algunos usan facebook para todo, no podrían vivir sin él porque han construido su mundo en base a lo que éste servicio nos ofrece, como se ve en algunos episodios de la serie «Black Mirror»; otras personas lo manejan de manera selectiva y moderada; y hay quien prefiere no tenerlo. Y en el resto de redes sociales ocurre algo similar. Los poderes intentan corrompernos, hacernos más dóciles para tenernos mejor controlados, pero la decisión última debe ser nuestra. Un abrazo, Alex.
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El problema es que puede que nosotros tengamos criterio y capacidad para oponer cierta resistencia a esa tremenda presión, pero hay personas que no tienen los recursos necesarios para ello y se los están ‘comiendo intelectualmente’ de una manera salvaje… Creo que está conversación daría para mucho delante de un café o, casi mejor, unas cervezas…, abundando en lo del ‘mundo real’ 😉
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Pues sí Alex, a ver si te pasas algún fin de semana por Madrid y charlamos un rato …
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Hola, Raúl.
Yo voy a disentir un poco, no del todo. Es cierto todo lo que decís y dice Manolo García sobre las redes: enganchan, roban tiempo que podrías dedicar a otras tareas más interesantes, aíslan de la realidad, del contacto cara a cara con otras personas reales, llenan la mente de ruido, dificultan la concentración…
Pero… y ahora viene mi disentimiento: ponen en contacto a personas con intereses comunes que de otro modo nunca se hubieran conocido, acercan información muy interesante y permiten, a los que no tienen otro canal, que lo que crean llegue a otros (sin cobrar, eso sí) En ese sentido son muy democráticas y hasta altruistas.
Y sobre la canción me parece preciosa tanto en música como en letra, puede que me guste más que «Insurrección» solo que «Pájaros de barro» me trae recuerdos tristes. Que no voy contar, tranquilo, jajajaja.
Un saludo.
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A eso me refería en el comentario que le he hecho a Alex. Las redes sociales son herramientas muy potentes y válidas que, si las sabemos utilizar, pueden resultar muy interesantes. Si no hubiera sido por ellas yo no os habría conocido a todos vosotros y, a lo mejor, hubiera seguido dando la lata a mi mujer con mis rollos musicales. Estoy muy de acuerdo contigo, lo importante en todo esto es el uso y el abuso que podemos hacer de todo esto. Ya sabes que, si quieres, puedes contarlo o, tal vez, dejarlo para alguno de tus relatos … Saludos.
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En la segunda parte de tu comentario, la parte positiva de las redes e internet, tienes toda la razón del mundo, claro que sí. Internet es maravilloso y ya no solo una fuente de información brutal, sino la puerta virtual literalmente a casi todo, algo que desearía o habrían soñado gente del Renacimiento, o de hace 2 o 3 siglos. El problema es lo otro, la parte adictiva, y como dice Alex dejar que nos devoren, ya no solo intelectualmente sino vitalmente, nuestro tiempo libre. Claro, ya se crean dos vidas y has de ser casi superman o superwoman para tener tiempo y repartirte entre ambas. Pero como bien dice Raúl la decisión final la tiene uno mismo, puede decir «hasta aquí, basta, o basta por hoy» y apagar el dispositivo, o levantarte de la silla. Eres tú el que ha de tener la sartén por el mango, pero esto implica que te plantees estas cuestiones, que puedas a veces ser firme y disciplinado en ese sentido.
Y no es la primera vez que he argumentado… en internet quizá incluso sacas la parte más auténtica de ti mismo muchas veces más que en la vida de ahí fuera (a la que me niego a volver; es broma), porque es tu interior y como dices conectas con gente con los mismos intereses, inquietudes, etc.
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Pues, Internet es una herramienta como cualquiera , depende de cada uno como utilizarla. Es que con un destornillador se puede matar , pero a nadie se le ocurre culpar en ello a destornillador. Tus comentarios de hoy son impresionantes igual ( o más) que el mismisimo Manolo García. Un beso.
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Agudísima tu observación, con un destornillador se puede matar… es así, depende del uso de las cosas. De acuerdo. Aunque internet tiene sus «peligros»; pero mirado desde el otro punto de vista, somos nosotros los que hemos de gestionar la situación. Besos.
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Lo de los peligros de Internet ya nos damos cuenta . Es un mónstruo totalmente descontrolado y con mucho poder .
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Gran comentario el de What, ¿verdad? Muy atinado lo del destornillador… Abrazos.
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Por partes.
Desde Los Burros y pasando por EUDLF, Manolo García lleva una carrera musical como muy pocos en este país. Solo que a mí me parece que lleva bastante tiempo repitiéndose y ya me resulta algo cansino. Me quedo con su primera etapa en solitario y, como no, con la de EUDLF (Los Burros nunca me llegaron a calar), si bien he de reconocer que no es de los grupos que hayan perdurado en mis gustos, de esos que siempre vuelves a escuchar con agrado.
Quizás por empacho, realmente no lo sé, que cuando en su día “Insurrección” fue casi un himno, se les escuchaba a todas horas y en todas partes.
En cualquier caso, es una cuestión de gustos, que su obra ahí está y es de una calidad indiscutible en muchos de sus temas.
Y respecto a sus reflexiones y su enojo con las redes, pues ya lo habéis dicho todo, y muy bien, que la virtud está en el término medio, o que el veneno está en la dosis, en fin, poco que añadir salvo que debería de recapacitar un poco sobre su presencia gratuita, porque también es una publicidad gratuita, un magnífico escaparate, y un modo inigualable de llegar a millones de personas. Vaya lo uno por lo otro.
Saludos
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De aquel movimiento musical de los años ochenta y noventa, Manolo García es una de las figuras más destacadas y, como bien dices, con una trayectoria larga y de calidad; ahora mismo se me ocurren dos nombres más con una relevancia similar: Enrique Bunbury y Santiago Auserón, también con carreras en solitario importantes. A mí los Burros (tampoco Los Rápidos) me han llamado mucho la atención, en cambio El Último de la Fila me aparece una de las mejores formaciones de pop y pop-rock que habido en España. Eso que comentas del empacho ya lo hemos debatido en otras ocasiones; lo que yo denominaba «agotamiento» y otro amigo bloguero, Salva, lo calificaba como «putrefacción sonora». A la música hay que darle también su espacio y sus pausas, para no caer en el agotamiento, que es lo que suele pasar cuando pones un disco sin descanso, una y otra vez, o cuando las radios no paran de poner a todas horas la misma canción. Creo que estamos de acuerdo con lo de internet, hay que aprovechar las ventajas que nos ofrece y huir de sus trampas. Saludos.
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Recordando, creo que les tomé manía por un concierto suyo al que asisti y que me defraudó hasta el punto de salirme, por primera y única vez en mi vida. Entre que el directo era con un sonido flojito y pobre, que Manolo García es muy soso en el escenario, y que a mí esa noche el cuerpo me pedía comisaría y allí no la encontraba, les eché la cruz.
O eso creo, que hoy no estoy para muchas elucubraciones tal salir mal parado en mi cuerpo y mi hacienda tras feroz y desigual combate con mi dentista. Saludos.
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Es curioso porque yo los he visto varias veces y siempre he salido muy contento por el sonido, por el trato con el público y por su entrega, en especial Manolo García. Uff, espero que te vayas recuperando de tu pelea con el dentista. Saludos.
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Seguramente muchos grupos no les haria gracia que les grabasemos sus discos en los 80s en nuestros cassettes,y que el grupo que salia en Aplauso al día siguiente lo iba a conocer todo el mundo y iba a vender discos como churros…. Pero ahora estamos en la hora de internet y para muchos grupos es una plataforma de despegue que se lo pregunten a grupos como Love of lesbian que vivieron el mayor de los silencios televisivos y radiofonicos y si no es por internet no hubiesen salido adelante…. Yo he conocido muchos grupos por internet viendo sus videos y luego he comprado sus discos o he ido a sus conciertos…. Y tambien he conocido gente como tú que compartes mis gustos y ten seguro que tengo más empatía qué con mucha gente que conozco fisicamente… Las redes son instrumento que puede servir para unir a gente y para todo lo contrario,… No hay que matar al mensajero, pero hace falta mucha educación…
Saludos y me voy a tomar unas cañas a tu salud este fin de semana.
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Y no te olvides de la financiación de discos por internet, yo ya he participado en algún que otro crowdfunding. Hace tiempo que dediqué una entrada a la guitarrista Susan Santos, de la que me llegó información gracias a Marta (We Are Rock), entonces estaba buscando fondos para grabar su disco; participé en el crowdfunding, incluso la vi en directo; ahora ha sacado o está a punto de sacar nuevo disco, ya con compañía discográfica y, además, ha obtenido un premio en los European Blues Awards. Probablemente ella no opine igual de internet y de las redes sociales que Manolo García. Eso es precisamente lo que quería decir en comentarios anteriores, hay que aprovechar los recursos y no dejar que esos recursos se aprovechen de ti en forma de ludopatías, obsesiones por los «likes» y perversión de las relaciones entre personas. Es fácil decirlo pero, para muchos, como decía Alex, es difícil de llevar a cabo. Así es, Vidal, en internet (al menos en el mundo bloguero, que es el que más conozco) puedes encontrar a gente con la que entras en sintonía y luego cuando las conoces en persona esa sensación incluso aumenta, me pasó con Alex (Rocktelegram) y con Antonio (Diccineario) y me imagino que también me pasaría contigo. Saludos, y a disfrutar de esas cañas.
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No se, si El Último de la Fila en estos tiempos hubiese hablado tan mal de las redes y si de la falta de programas musicales en la Tv.
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La verdad es que yo no he seguido a Manolo García muy activamente desde que se echó a andar en solitario pero, aún así, sus canciones se acaban metiendo de una manera u otra. Esta es, con diferencia, la que más me gusta de todas las que ha hecho en solitario y, sí, creo que incluso pueda superar a lo que hizo con Quimi. Aún así hay muchos temas de El último de la fila que siempre serán icónicos. Buena entrada Raúl, saludos.
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Aunque algunos discos de Manolo García puedan incluso superar en calidad a los del Último de la Fila (me imagino que muchos no estarán de acuerdo …), los que crearon el estilo fueron éstos últimos, y eso siempre tiene un valor incalculable ¡Muchas gracias, Marta! Un abrazo.
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