Ya lo comentábamos en una entrada anterior dedicada al tema “Hit the Road Jack”, Ray Charles fue un agitador musical en una sociedad, la de finales de los cincuenta, dividida entre blancos y negros y completamente dominada por los usos y costumbres puritanos. En el libro Brother Ray. La autobiografía de Ray Charles (Barcelona: Global Rhythm, 2007), escrito por el propio Ray Charles y por David Ritz, el músico estadounidense relata cómo compuso la canción que hoy nos ocupa, “What’d I Say”:
“Sucedió que estábamos tocando una de las últimas piezas de baile, en algún sitio en el Medioeste (de EE.UU), y todavía teníamos que ‘liquidar’ otros 12 minutos antes de que finalizara la sesión. Un concierto típico de esta clase se prolongaba unas cuatro horas, incluyendo los 30 minutos del intermedio. Era cerca de la 1 a.m. y recuerdo que ya habíamos tocado nuestro repertorio en su totalidad. No quedaba nada que se me pudiera ocurrir, entonces le dije a la banda y a The Raelettes (que formaban el coro): escuchen, voy a tratar de jugar un poco, tocando y cantando. Ustedes solamente síganme en lo que yo haga. Entonces, comencé a tararear algo, unos pequeños compases que estaban flotando dentro de mi cabeza. Me sentí bien y seguí tocando. Una cosa llevó a la otra, y me encontré cantando y pidiéndoles a las chicas que repitieran después de mí … Luego, podía sentir que toda la estancia retumbaba y se agitaba ferozmente” (texto tomado de la web En clave de recuerdo).
Es decir, había compuesto una canción en plena improvisación, llena de energía, con una letra inconexa y cargada de intención sexual, un diálogo entre el cantante y su coro que, como dijeron algunos críticos musicales de la época, “parece empezar en una iglesia y acabar en la cama de un dormitorio”. Decidieron grabar la canción y publicarla, ya con una letra algo más trabajada y con algunos retoques de autocensura. Sin embargo, no fue suficiente para evitar la polémica; a los colectivos religiosos no les gustó que se utilizara el góspel con esos fines, y las emisoras de radio se mostraban muy reticentes a radiar una canción tan “atrevida” y larga (más de seis minutos), aunque esto último finalmente se resolvió dividiendo la canción dos partes. A pesar de todo, “What’d I Say” fue todo un éxito, esa mezcla de góspel y R&B había dado lugar a un nuevo género: el soul. En la década de los sesenta se hicieron muchísimas versiones de esta melodía como, por ejemplo, las de Cliff Richard, Jerry Lee Lewis, The Anita Kerr Singers, The Crickets, The Searchers, Etta James, Dick Dale, Roy Orbison, Elvis Presley, The Ronettes, The Graham Bond Organisation, Gerry & The Pacemakers, Dione Warwick, Johnny Cash & June Carter, Solomon Burke, Tony Sheridan & The Beat Brothers, Jimmi Hendrix o las dos que acompañan al original: la primera de ellas a cargo de Brenda Lee (con Jimmy Page a la guitarra) y la segunda interpretada por John Mayall & The Bluesbreakers. Por supuesto, después de los años sesenta se han seguido grabando versiones, os dejo las de Rare Earth, Freddie King, Eddie Cochran, Carl Perkins, Paul Revere & The Raiders, John Lee Hooker, John Scofield y Moris (en español).
¡Cumbre Ray Charles! ¡Y qué manera de acabar un concierto!¡La de veces que me ha levantado este tema!
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Sólo alguien tan especial como él es capaz de improvisar algo así, y eso que era para alargar un poco más el concierto … Un abrazo, Antonio.
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Me gustan las tres versiones que has seleccionado, chulísimas, aunque me tira especialmente la garra de Brenda Lee desgarrando el tema. ¿Soy objetiva?
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¡Gracias Marta! Es difícil ser objetivo con la música, al menos a mí me cuesta mucho. En cualquier caso, la versión de Brenda Lee (con la inestimable ayuda de Jimmy Page) es arrebatadora por su fuerza. Mira que tiene versiones esta canción, pero te puedo decir que no tuve ninguna duda, siempre supe que una de las tres tenía que ser la de Brenda. Un abrazo.
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Mucha de la culpa de que ande perdido del panorama actual popero/rockero la tiene, entre otros muchos, este buen señor. Creo que ha sido una de la figuras claves en la música moderna (no me acaba de gustar el término, pero podría valer para entendernos), y bien vale pararse en él un buen rato. No tiene desperdicio.
Decía arriba lo de la culpa, porque un tanto hastiado de esperar la segunda venida de The Beatles, y mientras intentaba “pescar” algo de lo que iba saliendo nuevo al panorama musical, comencé a escuchar a Ray Charles, a Miles Davies, Etta James, o a Charlie Parker, por nombrar algunos. Y para mí sorpresa, cada vez que lanzaba la caña en esas otras aguas, acababa con el cesto lleno de buena música, mientras que si intentaba hacer lo propio dónde siempre, me costaba unos esfuerzos enormes, y baldíos la mayoría de las veces. Y corriendo además enormes riesgos, no sea que te mordiera el anzuelo un Bustamante cualquiera, y tener encima que llevarlo al punto limpio, que determinadas especies no las puedes devolver al agua a poco que ames a tu prójimo.
Así pues, muy recomendable el artista y el tema, que ya me eran conocidos, aunque no la cantidad de versiones con las que cuenta, entre las cuales no reconocí nunca la de Moris como tal, bien es cierto que entre ambas escuchas transcurrió mucho tiempo.
Y muy de acuerdo con Marta y lo de Brenda Lee.
Saludos y buen fin de semana. Yo ya lo he empezado comiendo y bebiendo como si no hubiera un mañana, que hay días en los que es mejor seguir las recomendaciones de los camareros que las de los médicos, y hoy es uno de ellos.
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Me acuerdo que yo empecé a escucharle con una cinta de grandes éxitos, me la llevé a un viaje con amigos y fue la que más pusimos. A partir de ahí quise escuchar más de él y, al igual que comentas, todo me parecía bueno. Mucha gente piensa que el soul, el R&B y este tipo de música está anticuada, para mí no tiene fecha de caducidad; ahora vendrá algún moderno y hará una versión de Ray Charles, entonces todo el mundo alucinará y pensará que Ray Charles es algo así como la nueva Rosalía. Me acuerdo que muchos conocieron a Roy Orbison cuando se estreno la película «Pretty Woman», algunos pensaban que era una canción actual, hecha para la película … Ten cuidado con los camareros no te coloquen algo en mal estado, jajaja. Buen fin de semana.
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Entre los camareros y los médicos, me quedo con los primeros por puro pragmatismo. Nunca sus recomendaciones me causaron malestar alguno, cosa que no puedo decir de los galenos, que pretenciosamente dicen salvarte la vida, cosa absolutamente imposible, pues en todo caso podrían prolongártela, y en unas condiciones que en muchas casos distan mucho de ser consideradas como dignas. Y es que la medicina, como el trabajo, está a veces sobrevalorada.
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Buen caladero para buscar musica. Con la mente abierta rapidamente se encuentran buenas joyas.
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¡¡¡Genial!!! Así en plan improvisando y jugando… «seguidme el rollo y ya está». Qué grande, es un temazo impresionante, arrollador. ¿Y así nació el soul, de verdad? Pues otro señor que para mí es un gran desconocido, mal hecho, mal hecho…
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Ray Charles está en el frontera y en el origen de diferentes estilos: el soul, el R&B, incluso el R&R, y todo ello a partir de la música religiosa afroamericana: el góspel. Era único haciendo versiones e interpretando, además de componer sus propios temas. Cuando comiences a escucharlo, y a verlo en youtube, no vas a poder parar. Saludos.
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Tendré que buscar un Greatest Hits. El blog brasileño de marras, jajaja. Hace pocos días venía la discografía enterita de Dylan, entre otras joyas…
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Grande Ray Charles, pero la versión de Brenda Lee… uaaauuu… ¡qué buena!
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¡Qué fuerza tiene, Brenda Lee! ¿Verdad? Y esa voz rasgada … Un abrazo.
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Ray, figura indiscutible. Soul, jazz y hasta country. Un adelantado. Esta semana en un concierto de Jazz de Vincent Herring (saxo alto ) pude comprobar la buena liga que hace Ray Charles con el jazz el soul jazz. El concierto acabo con Hard Times.
Gran version de los Bluesbakers. Un pequeño homenaje a los Beatles incluido.
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Totalmente de acuerdo, se lo comentaba a What, fue un adelantado; se situó en la confluencia de varios estilos, fue pionero en varios de ellos y en otros, como el country o el jazz se manejó muy bien. Tengo un disco que se llama «Modern Sounds in Country and Western Music» que es una maravilla, y de jazz también tiene algunos. John Mayall & the Bluesbreakers son siempre un valor seguro, ¿has escuchado el solo de batería? La versión pertenece a uno de sus primeros álbumes, el titulado «Blues Breakers with Eric Clapton», en el que tocaron, además de John Mayall, Eric Clapton, John McVie y Hughie Flint a la batería; en ese disco también está «All Your Love», de Otis Rush, que ya apareció por aquí: https://laguitarradelasmusas.com/2018/01/19/otis-rush-john-mayall-steve-miller-band-all-your-love-i-miss-loving/. Saludos.
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Asi acabo el concierto
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Buen final ¡Gracias lrotula!
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La versión de Brenda Lee es genial!! Es un buen rollo de verdad…el puro placer. Un beso.
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Me alegro que os haya gustado la versión de Brenda Lee, finalmente la música es pasión. Besos.
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Eso es lo que se llama fluir y ser un genio de la improvisación.
Me encanta eso de empezar jugando y acabar provocando que toda la sala se «agite ferozmente».
Saludos, Raúl
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En el jazz las improvisaciones se esperan, forman parte de lo que tiene que ser este estilo; en cambio, en géneros como el R&B y el soul hay que ser muy bueno para «agitar la sala» con una improvisación. Saludos, Evavill.
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Pues también yo me quedo con la versión de Brenda Lee, aunque las tres son muy guapas… Quizá a la de John Mayall le sobre un poco de solo de batería, ¿no?
Abrazos!!!
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¿Qué tal Alex? A mí me gusta el solo de batería, tal vez porque me da la sensación que la canción es muy rítmica, y tanto la batería como el bajo juegan un papel destacado. En cuanto a la versión de Brenda Lee, es fabulosa, y ahí escuchamos de nuevo a Jimmy Page como músico de sesión … Abrazos.
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