Vainica doble. “Habanera del primer amor”

Aloma Rodríguez, en el número 7 del periódico semanal Ahora (30/10/2015), recogió algunas opiniones de músicos, cineastas, artistas e intelectuales sobre el dúo español Vainica Doble, formado en 1971 por las inclasificables Gloria van Aerssen (1932-2015) y Carmen Santonja (1934-2000):

“[Vainica Doble] es una de esas rigurosas excepciones irrepetibles, un diamantino alucine que expandió vertiginosamente las posibilidades del lenguaje musical y lírico de la canción en castellano”

Abel Hernández -El Hijo-

“[La característica principal de Vainica Doble es] el uso magistral que hacen del castellano. Cuando oigo a alguien decir que el idioma natural del pop y el rock es el inglés pienso que no han escuchado a Vainica Doble. No solo me refiero al contenido de sus letras, sino a la métrica, la prosodia, las rimas, el léxico que utilizan. Los Beatles son geniales y han sido mil veces imitados, pero es que Vainica Doble son también geniales y no se las puede llegar a imitar”

Nacho Vegas

“[Vainica Doble] son algo así como un lujo que no nos merecemos, como tampoco nos merecemos a Quevedo o al Arcipreste de Hita”

Jaime de Armiñán

“[Fueron pioneras] en el descubrimiento de una modernidad que se basa en el ejercicio de la máxima libertad y en la recuperación de los elementos de toda época y estilo y la apropiación de géneros de fuera y su adaptación”

Abel Hernández -El Hijo-

“Eran imposibles de clasificar, más modernas que los modernos sin pretender serlo. Descolocaban a cualquiera, y aún siguen haciéndolo. Podían pasar de una habanera a un rocanrol con la misma frescura, buen humor y mala uva, porque también tenían mucha. Se habla mucho de su costumbrismo de clase acomodada, pero sus canciones siempre encerraban una visión muy ácida del mundo”

Nacho Vegas

“(…) nadie cantaba ni canta con la frescura de intenciones y la ternura crítica con que ellas lo hacen. Son unas canciones ingenuas, torpes, amables, despiadadas, melancólicas, conmovedoras, infantiles, maduras, perversas, meticulosas, anárquicas. Son hijas o nietas del franquismo y madres de la libertad”

José Manuel Caballero Bonald

Estas “madres de La Movida” o “abuelas del indie”, como así se las ha calificado, se conocieron por casualidad, en la Ciudad Universitaria de Madrid; así lo han contado los hijos de Gloria van Aerssen: “todo empezó cuando conoció a la tía Mari Carmen en una parada de autobús. Estaba silbando Tannhäuser y nuestra madre se acercó y se unió a ella silbando una segunda voz, y a partir de ese momento se hicieron inseparables” (La Fonoteca). Cuando se encontraron, Gloria van Aerssen cursaba Bellas Artes, mientras que Carmen Santonja estudiaba piano en el conservatorio. Juntas grabaron discos, pusieron música a programas de televisión y películas e inspiraron a artistas de todo tipo, algunos de ellos abanderados de lo que, poco tiempo después, acabaría conociéndose como “Movida”. Si queréis saber más de la vida y la obra de este creativo dúo, lo podéis hacer a través de los diferentes enlaces que he ido dejando a lo largo de esta entrada.

Si os apetece zambulliros en el universo Vainica Doble, podéis empezar con su segundo Lp de estudio, “Heliotropo” (1973); en este álbum se incluyó uno de sus temas más conocidos: “Habanera del primer amor”, una canción que inicialmente no contaba para el disco, quizás porque Gloria y Carmen la consideraron algo cursi. A mí me parece una maravilla; parafraseando la letra de esta composición, creo que no se puede expresar con mayor emoción y lucidez el sentimiento que acompaña a los primeros amores infantiles, los que se cocinan como flanes de arena, en los que se descubre el suspiro como un sentimiento extraño y, también, los que acaban debido al implacable paso del inclemente impertinente tiempo. En este directo de RNE las podéis escuchar (a partir del minuto 8:13). En cuanto a las versiones de “Habanera del primer amor”, ninguna con la magia del original, mencionaremos las de Marcela Morelo, Sisa y Suburbano y Los Fantasmas del Paraíso (Antonio Galvañ y Fernando Márquez -El Zurdo-).  

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Autor: Raúl

Me llamo Raúl Rodríguez, me dedico a la docencia universitaria y a la investigación en el ámbito de la Historia de la Ciencia, actividades que forman parte de mi vida desde que acabé la carrera, allá por 1986. Sin embargo, la música está conmigo desde mucho antes, desde mi infancia y primera adolescencia, y ha sido siempre una leal compañera. Decidí abrir un blog de canciones con el propósito de encauzar mis inquietudes musicales a través de un canal que pudiera ser sintonizado por otras personas con intereses similares y que, además, sirviera como foro de opinión para todos aquellos que quisieran compartir su pasión por la música. Decidí llamar a este espacio "La Guitarra de las Musas", en honor de las diosas griegas de las Ciencias y las Artes, especialmente de la Poesía y la Música. Quiero pensar que si hubieran tenido guitarras –y baterías, bajos, teclados y demás instrumentos de nuestro tiempo- hubieran sonado como la música propuesta en este blog. En este espacio, el rock en casi todas sus vertientes será el protagonista pero, también, otros estilos como el blues, el jazz, el pop, el soul y las melodías más pegadas a nuestra cultura: cantautores, canción melódica, boleros, corridos mexicanos, tangos, rumbas e, incluso, copla. Por favor, que nadie se enfade conmigo si no encuentra aquí la música que le gusta; la selección de los temas y los comentarios realizados responden, únicamente, a mis intereses particulares que, como bien puede verse, están un poco anticuados. Todos aquellos que busquen música actual no la encontrarán en este sitio.

18 opiniones en “Vainica doble. “Habanera del primer amor””

  1. Pingback: Vainica doble. “Habanera del primer amor” – Conavegación | Blogosfera

    1. Gracias a ti, Carlos, por saber apreciarlo. Fueron modernas en los setenta, precursoras en los ochenta e inspiradoras para los que vinieron después. Saludos.

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  3. Vainica Doble, cómo olvidarlas, estaban además muy presentes en muchos programas de la tele, como comentas, “Con las manos en la masa” el más popular, que presentaba la hermana de Elena, con su sintonía tan divertida. De la canción que más acuerdo es de una que decían todos los refranes. Eran muy originales y distintas, tanto en su forma de cantar, como en su aspecto, bohemio y desenfadado. Precioso el tema que has puesto, esa Habanera de los primeros amores. Muy tierna. Me ha encantado que las recuerdes y aunque hayan podido influir en otros grupos, yo no encuentro a nadie que se les parezca. Dejó un vídeo de una colaboración que hicieron para un programa, que además salen sitios muy chulos de la Mancha y ellas… pues son ellas, las Vainica Doble. Un abrazo, Raúl.

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    1. He de confesarte que, quizás, yo las conocí gracias al programa «Con las manos en la masa»; al final dejo la carátula del programa con la canción, la cantaban Gloria Van Aerssen y Joaquín Sabina. La de los refranes creo que se llamaba así: «Refranes», tenía un arreglo de guitarra rockero. Fueron transgresoras utilizando elementos cotidianos y recuerdos costumbristas, y lo consiguieron gracias a su extraordinaria capacidad de comunicación, tanto en lo musical como en lo literario, como he intentado recalcar al comienzo de la entrada, con todos esos testimonios. Un abrazo, Eva. Y gracias por ese «caramelo de limón» …

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      1. Nos han acompañado durante muchos años Vainica doble, empiezas a tirar y salen un montón de canciones porque también hicieron la sintonía de la serie “Celia” y otras. De los enlaces que pones en la entrada, me gusta cuando Nacho Vega destaca su dominio de la lengua, es verdad, ocurrentes y divertidas, pero menudas letras y léxico que utilizaban, detrás de su frescura había mucho trabajo. Me ha hecho mucha ilusión oír esos “Refranes” que me sonaban de oírlos de pequeña y se me quedó grabado el estribillo “Haz bien y no mires a quién”. Abrazos, Raúl

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        1. A mí es lo que más me llama la atención de este dúo, ese uso del lenguaje, que parece espontáneo pero que tiene muchísimo trabajo detrás. Su propuesta es, sin duda, muy intelectual, aunque ellas se afanen en convertir su música en una experiencia cotidiana apta para todos los públicos. Un abrazo, Eva.

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      1. Gracias por el aporte, Vidal. Había escuchado a este grupo, en su día me llamó la atención que tomaran el nombre de la peli de Éric Rohmer. Efectivamente, las influencias son más que evidentes, aquí tenemos un ejemplo de que Vainica Doble fueron algo así como las abuelas del indie. Un abrazo.

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    2. Bueno, a mí no se me parecen mucho, ni siquiera en las intenciones: Vainica Doble eran tirando a hippies y Mecano más bien pijos, aunque las influencias siempre está ahí, para quien quiere tenerlas en cuenta, en este caso de Vainica Doble hacia Mecano. Abrazos.

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    1. En cualquier otro grupo, solista o dúo esta canción así hubiera parecido cursi; ellas, sin embargo, cuentan una historia tierna, llena de recuerdos universales, de esas que te hacen buscar en nuestra memoria más remota. Besos, Evavill.

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  6. Uuoooooo… conocí esta canción por la versión de Marcela Morela en el CD Mujer (que tengo en algún sitio del camarote y ahora necesito encontrar) y me cautivó. Sí que es cursi, pero a la vez tan inocente y dulce que encandila. No sabía que era de Vainica Doble y, aunque el nombre me suena, no sé por qué. Te hago caso y me voy a por Heliotropo.
    ¡Un abrazo!

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    1. Voy por la cuarta canción y tengo que volver por aquí: pero ¿qué maravilla es esta? Ahora entiendo lo de inclasificables. Esas letras, y los sonidos, y esas letras otra vez (yo tiro para lo mío). Mundiales, lo que más me ha gustado y sorprendido últimamente. Otro abrazo 🙂

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