El quinto álbum de estudio de los estadounidenses The Doors -protagonistas de este blog en los temas “Light My fire”, “Break on Through (To the Other Side)”, “The End” y “Riders on the Storm”- se tituló “Morrison Hotel” (1970). Fue grabado después de “The Soft Parade” (1969) que, aunque exitoso, en su momento no fue muy bien valorado por la crítica al considerar que, en cierto modo, habían traicionado el sonido de la banda con arreglos orquestales y algunos instrumentos no habituales, como el trombón, el saxo o la mandolina. La inestabilidad de Jim Morrison, en gran parte causada por su desmedido consumo de alcohol, se trasladó a las sesiones de grabación, que se hicieron insoportables, carísimas y eternas. Antes de que la banda acabara disolviéndose debido a las tensiones acumuladas, Jim Morrison decidió abandonar el grupo, aunque Ray Manzarek finalmente le convencería para que se quedara seis meses más. Con todo, Morrison continuó haciendo de las suyas; en noviembre de 1969, cuando ya habían empezado a grabar “Morrison Hotel” o estaban a punto de empezar, fue protagonista de un altercado en un avión, por el que acabaría siendo acusado de interferir en un vuelo intercontinental, de embriaguez pública y de acosar al personal de la línea aérea; ante el peligro de que acabara ingresando en la cárcel, una azafata finalmente revocó su testimonio, alegando que se había equivocado al identificar a Morrison como el causante de aquel episodio.
El tema más conocido de “Morrison Hotel” quizás sea el titulado “Roadhouse Blues”, con el que se inicia el disco. Fue compuesto, en lo musical, por todos los miembros del grupo, mientras que la letra fue escrita por Jim Morrison. En la grabación de este blues-rock, comercializado como la cara B del single “You Make Me Real”, intervinieron Lonnie Mack (bajo) y el exlíder de Lovin’ Spoonful, John Sebastián (armónica); el resto de músicos eran los habituales: Jim Morrison (voz), Bobby Krieger (guitarra), Ray Manzarek (teclados) y John Densmore (batería). El álbum “An American Prayer” (1978), publicado tras el fallecimiento de Morrison, contiene una magnífica versión en directo de esta canción (aquí la podéis escuchar, y también ver a los Doors interpretándola). También existe una curiosa grabación de 1969, con Ray Manzarek como vocalista, en lugar de Jim Morrison; y otra, a modo de tributo, con John Lee Hooker y Jim Morrison compartiendo la interpretación vocal de esta melodía. La segunda versión destacada de hoy es la de los británicos Status Quo, incluida en su disco “Piledriver” (1972); y la tercera es la de los estadounidenses Blue Öyster Cult, publicada como single en 1982. Y finalizo recordando otras versiones, en concreto las de Frankie Goes to Hollywood, Eric Burdon y Brian Auger Band, Ron Evans Group, The Jeff Healey Band, Elkie Brooks, Eddie Money, The Doors y Eddie Vedder, Creed, Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, Divididos -éstos dos últimos argentinos- y Sweet Little Band (música para bebés).