Änglagård es una banda sueca creada durante el verano de 1991 en torno al guitarrista Tord Lindman, que nos ofrece un sonido muy influenciado por grupos como Yes, King Crimson, Camel y tantos otros de aquella época pero, a la vez, adaptado a los años noventa, con mucha presencia de ambientes oscuros y enigmáticos perfectamente conseguidos gracias a la notable calidad instrumental de sus componentes. La guitarra, el órgano y la batería (no os perdáis a este músico: Mattias Olsson) contribuyen al endurecimiento de los temas, mientras que la flauta es el contrapunto a este derroche de energía; su sonido es dulce y sosegado, ofreciendo un contraste que, desde mi punto de vista, es uno de los aspectos más interesantes de este grupo. No es muy habitual ver a mujeres en el rock progresivo, ésta es una de las excepciones; Anna Holmgren es la responsable de la flauta y, en gran medida, de los elementos de folk nórdico habituales en la obra de Änglagård. Tuvieron su período dorado entre 1992 y 1994, cuando grabaron “Hybris” (1992) y “Epilog” (1994); después se separaron, aunque siguieron ofreciendo actuaciones en directo (incluso algún disco en vivo, como «Buried Alive» -1996-) de manera esporádica; en el año 2012 volvieron a reunirse para grabar “Viljans Öga” (2012), su último trabajo de estudio hasta ahora, aunque recientemente ha sido publicado otro álbum en directo («Prog på svenksa – Live in Japan», 2014). «Epilog» es un disco fabuloso, pero el primero es una de las obras maestras del rock progresivo de todos los tiempos, a la altura de los mejores discos de los setenta. “Hybris” se compone de cuatro temas, aunque en una reedición posterior se añadió una cuarta pista (aquí lo podéis escuchar entero); yo os voy a proponer el primero de ellos, “Jordrök”, un tema instrumental de algo más de once minutos muy representativo de este grupo, de una belleza fuera de lo común. Comienza con una enigmática melodía de piano, ideal para una película de terror o intriga, después toman el mando la guitarra y la batería, protagonistas en este tema, al igual que la flauta; os recomiendo que tampoco os perdáis la explosiva entrada del órgano en el minuto 4:48.
4 opiniones en “Änglagård. «Jordrök»”
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Pues este grupo es nuevo para mí y, gustándome como me gusta el progresivo, lo apunto ahora mismo para poder escuchar el disco del que hablas con más calma. El tema instrumental de hoy me ha parecido bastante bueno, así que creo que esta banda no me decepcionará. Un abrazo y buen fin de semana.
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«Hybris» es un disco muy bueno, con muchas influencias del rock progresivo de los setenta, además de incorporar elementos procedentes del folk escandinavo. «Epilog» también está muy bien. Creo que te gustarán los dos. Buen fin de semana, Adrián
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Auténticamente Prog, desde luego… La escena nórdica es pródiga en bandas de una calidad increíble y que, curiosamente, se enmarcan con mucha frecuencia en los ámbitos del Rock Progresivo y todos los rangos del Metal.
Conocía a Änglagård desde hace tiempo, pero lo cierto es que no les he dedicado demasiadas escuchas y temas como este que nos propones, merecen mucho la pena… Las partes de flauta son camelianas totalmente y los arranques más energéticos tienen su toque crimsoniano, quizá por esa batería que recuerda un poco a Bill Bruford, ¿no?
Muy buenos. Saludos Raúl
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Es verdad que los nórdicos están muy presentes en todas las vertientes del metal, entre ellas el metal progresivo, aunque este grupo yo creo que es algo diferente, su propuesta es de rock progresivo puro, incluso yo diría que clásico, setentero. Y, efectivamente, las influencias de aquella época son notables; como bien, dices la batería (por cierto, un músico muy interesante) recuerda a King Crimson y, quizás también, esas fases como oscuras o depresivas. En cuanto a la flauta, estoy totalmente de acuerdo, suena muy Camel, sobre todo en algunos momentos. Es un grupo de esos que apetecería que tuvieran más discos. Saludos, Alex.
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