“Moonflower” es el título de un álbum doble lanzado por Santana en 1977. Probablemente sea el disco en directo más famoso de la banda liderada por el guitarrista estadounidense (nacido y criado en México) Carlos Santana. En entradas anteriores, dedicadas a los temas “Evil Ways” y “Samba pa ti”, ofrecíamos alguna pincelada biográfica en torno a los orígenes de Carlos Santana, cómo se fue interesando por la música y cómo acabaría siendo mundialmente conocido por su explosiva interpretación de “Soul Sacrifice” en el Festival de Woodstock (agosto de 1969); en aquellos posts, también tratábamos de poner en valor los dos primeros discos (“Santana”, 1969; y “Abraxas”, 1970) de esta formación, que suele estar considerada como la pionera del rock latino o “latín rock”. Los siguientes álbumes de Santana, especialmente “Caravanserai” (1972), “Wellcome” (1973) y “Borboletta” (1974), estuvieron más cerca del jazz rock (o jazz fusion) que del rock latino característico de los primeros discos. Tras los trabajos titulados “Amigos” (1976) y “Festival” (1977), se publicó el doble álbum que comentábamos anteriormente: “Moonflower”.
A pesar de que, en 1977, Santana tenía material más que de sobra para lanzar un doble disco en directo, “Moonflower” se planteó como un álbum híbrido (estudio/directo), de tal manera que los temas de estudio son nuevos (la verdad es que se podría haber grabado un disco de estudio sólo con estas canciones …), mientras que los temas en directo corresponden a grabaciones en vivo de la banda y, por lo tanto, eran melodías bien conocidas. Por ejemplo, “Let The Children Play”, “Europa”, “Black Magic Woman / Gypsy Queen”, “Dance Sister Dance” o “Soul Sacrifice /Head, Hands & Feet”. Entre las grabaciones de estudio, hay varias en la órbita del jazz rock, como “Dawn / Go Within”, “Zulu”, “I’ll Be Waiting”, “Bahia”, “El Morocco” o “Trascendance”, pero las que más destacan son una versión del clásico de los Zombies “She’s Not There”, en formato pop-rock latino, y la balada romántica “Flor d’Luna”, compuesta por el teclista de la banda, Tom Coster.
Este tema, uno de los imprescindibles para “bailar agarrao” en discotecas, guateques, fiestas de pueblo y saraos similares durante los años setenta del siglo XX, tiene algunas versiones (tampoco demasiadas), generalmente ejecutadas por artistas no excesivamente conocidos. Os recomiendo la del guitarrista catalán Santi Picó, incluida en el disco “Guitarras Mestizas” (1999), del que ya hablamos en una entrada anterior; la del grupo The Rosenberg Trio, entre el jazz y el flamenco; la de The Peter Pupping Band, en una línea similar a la anterior; y la del guitarrista italiano Alfredo Bochicchio.
La Guitarra de las Musas 
Con este calor lo de bailar «agarraos» no atrae mucho, pero es verdad que la canción invita a dejarse llevar y desconectar.
Un abrazo, Raúl
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Jajaja, además que ya no se lleva, los chavales de ahora no necesitan excusas para acercarse unos a otros. Aunque siempre nos quedará la canción …., y los recuerdos. Abrazos.
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Tiene razón Luna, que lo de bailar “agarraos” no es lo que más apetece 😁
En fin, Santana, guitarrista de referencia absoluta con trabajos muy diferentes, a veces más tribales como en sus primeros LPs, otros más melódicos, más hacia el jazz, siempre experimental… a mi me parece que lo de rock latino, aunque muchos temas se encuadren ahí y sean lo más conocido, en realidad se le queda bastante corto. Este “Flor de Luna” me ha sonado muy bien, también hacía mucho que no lo había oído, porque es de los que machacaron mucho en radios (y verbenas, si) y eso al final ya sabemos lo que pasa. Es una maravilla escuchar a Santana en cualquier registro, pero nombras uno de mis temas favoritos, la versión de “She’s not there” de Zombies, me he ido a tu entrada anterior, espectacular.
Gracias por traernos una vez más a este grandísimo músico, Raúl, que disfrutes del domingo y buena semana, a ver si refresca un poquito… Un abrazo
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Le comentaba a Luna, que ya no se lleva lo de bailar «agarraos», los chavales de ahora no necesitan excusas para acercarse unos a otros. Éste es el Santana más canocido por casi todo el mundo, el de las baladas, pero ya hemos tenido otras ocasiones para hablar del otro Santana, el pionero del rock latino, con esos percusionistas tan maravillosos. Como diría un antiguo bloguero, ya retirado, ésta es una canción que ha entrado en estado de «putrefacción sonora» (a mí me gusta decir que es una «canción agotada»), así que ahora lo escuchamos una vez y ya está, jajaja. Gracias por tus comentarios, Eva, y por leer la entrada sobre «She’s not there», otro temazo. Que tengas buena semana, a ver si no nos derretimos. Abrazos.
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Es un tema precioso y me parece una pena que no se lleve el agarrao porque era muy romántico. Aunque esta canción tiene partes de soltarse y bailar suelto.
Ahora se perrea, no digo que sea mejor ni peor, es distinto.
Besos, Raúl
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Jajaja, el perreo es el nuevo «agarrao», no se me había ocurrido. Tienes razón que este tema era de los que, al final, desconcertaba, y no sabías si despegarte … Besos, Evavill.
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Sencillamente magistral. La melodía es increíblemente bella y Santana se ha ganado un lugar entre los más grandes del rock, por derecho propio. Un maestro a la guitarra, alguien que ha demostrado que el rock no tiene fronteras, que siempre evoluciona y que esto del «rock latino» incluso le queda pequeño.
Y como podríamos decir con tantos artistas, si dentro del rock no hubiera surgido o hubiera un Santana, ciertamente le faltaría algo muy valioso.
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Su manera de tocar la guitarra ha influido en otros guitarristas, como Javier Vargas o Thomas Camille, y su estilo es inconfundible, ya sea por sus baladas o por sus temas de rock latino. Además, tiene una trayectoria muy larga, con muchos discos en su haber y actuaciones en directo memorables, como la de Woodstock. Saludos, What.
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