“Discovery” (1984) fue el primer álbum que Mike Oldfield grabó fuera de Inglaterra. Tras la gira realizada en 1983, se fue a vivir a Villars-sur-Ollon (Suiza), a una casa de dos mil metros cuadrados en los Alpes, desde donde se divisaba el Lago Lemán; mandó construir un estudio de grabación en aquella mansión para acometer esta tarea, a la vez que trabajaba en la banda sonora de la película “Los Gritos del Silencio” (1984). La producción musical corrió a cargo de Simon Phillips y del propio Mike Oldfield, quien también se hizo cargo del todos los instrumentos (guitarras, mandolina, bajo, piano, etc.), excepto de la batería, tocada por el mencionado Phillips; las voces fueron las de Barry Palmer y Maggie Reilly, la misma que formó parte del anterior álbum de Mike Oldfield, el titulado “Crises” (1983), ya aludido en este blog a propósito del tema “Moonlight Shadow”. “Discovery” está formado por ocho canciones: tres cantadas por Palmer (“Poison Arrows”, “Discovery” y “Saved by the Bell”), tal vez las más épicas y rockeras; tres por Reilly (“To France”, “Crystal Gazing” y “Talk About Your Life”), tal vez más poperas e intimistas; y una interpretada por ambos cantantes de manera conjunta (“Tricks of the Light”), mientras que el tema que cierra el disco es un excelente instrumental de más de doce minutos, titulado “The Lake”. Maggie Reilly y Barry Palmer no se conocieron hasta que se terminó el álbum y sus voces fueron grabadas por separado en el tema que comparten.
La estructura y el sonido de “Discovery” está en la línea del anterior, “Crises”, con canciones de corte pop-rock y una composición en la Mike Oldfield nos muestra todo su potencial como compositor y multiinstrumentista; el equivalente a “The Lake” en “Crises” era el tema homónimo de casi veintiún minutos de duración, mientras que la influencia de “Moonlight Shadow” es más que evidente en la canción protagonista de esta entrada, “To France”, la más conocida de “Discovery”, cuya letra hace referencia a la reina escocesa María Estuardo (María I de Escocia), que pasó gran parte de su vida en Francia al casarse a los quince años con el heredero al trono francés (Francisco II de Francia), después de un acuerdo matrimonial entre las Casas de Francia y Escocia que obligó al traslado de María al país galo cuando apenas tenía cinco años, separada así de su madre, a la que ya nunca volvió a ver. Os dejo con un directo de Mike Oldfield y con tres versiones de esta canción, una de la propia Maggie Reilly, otra de Kim Wilde y una más rockera, la de los alemanes Blind Guardian.




